Amig@s continuamos con la entrega de este maravilloso libro de Samuel Miralles...tematica el terror...pero el terror genera sorpresa y la sorpresa tambien genera felicidad...la felicidad es la que hay que tener en la vida...una felicidad que encontrareis leyendo a este autor...
RESERVADOS DERECHOS DE AUTOR
Por Samuel Miralles
....continuacion
Como si fuera mi segunda madre apunto de contarme un cuento sobre
lo que me habían contado de ellas las escuché mientras mi hermano jugaba con ellas.
Como si de una lección de moral se tratase, una lección de aprender a hablar cuando toca, el polvo derramado en mis labios los secó por completo dejando sin saliva mi paladar y bajando hasta mi garganta, enmudeciéndome y dándome ardor en la boca.
_Hablas mucho para nada, tu hermano es libre de hacer lo que quiera, tú mismo lo dijiste, entonces, ¿por qué sigues defendiendo esta aldea
que creís todos la elegida y la misericordiosa a la par que construís enormes muros de piedra y trampas para que no os robemos nada
si la sabia naturaleza no elige lo que es propiedad de alguien?
Refunfuñaron como tratándome de dar una lección de moral, además
de tener que soportar su maldad. Aturdido físicamente traté de recobrarme, y con un fuerte siseo, mas su dedo índice señalando su boca se marcharon. Yo intentaba salir fuera y pedir auxilio pero mi boca me lo impidió, al estar seca y enmudecida.
Nombraron a alguien que era el máximo cazador del mundo, el príncipe de la muerte o el carnívoro de nacimiento. Dijeron que cada uno es libre y que no existían elegidos, toda oportunidad de ser elegido corría a suertes de cazar ,nada más que eso, y no ser cazado.
Unas fuertes carcajadas se oían a lo lejos, las cuales me aterrorizaban de pensar que si ese máximo cazador venia aquí podría comer cualquiera de nuestras carnes, incluyendo la mía,lo que me hizo sudar y volver a tener temor en
mi corazón.Mas tarde,me acosté con miedo e impotente de lo ocurrido y tuve una visión en la que yo me sentí tremendamente defraudado
y triste de haber sido tan benevolente con las brujas, como si yo les hubiera cedido el paso y contemplaba impotente como todas las plantas,árboles,flores y demás enseres del pueblo eran arrasados por un gran torrente de fuego.Observé todo aquel espectáculo paralizado de miedo y con estupor, a la par que responsable por no hacer temer al pueblo de las brujas,oyendo carcajadas de brujas al fondo.
Esta parecía una visión que no tenia fin y a la cual respondía la voz de mi certeza como un fatal sino ineludible.
Cuando me desperté recordé el nombre del gran cazador:Satán.
Nunca había oído hablar de él. Unas piedras cayeron del árbol donde estaba cobijado y fue cuando desperté de aquel lento y angustioso sueño.Desde entonces no volví a ver a mi hermano.Cuando el sol salió fui a visitar a mis padres con gran arrepentimiento de no haber cuidado de mi añorado y querido hermano.
Sentía arrepentimiento y responsabilidad por la aldea, cambié de ideas y participé mas en el pueblo.
Sin embargo,el arrepentimiento y el miedo primaban sobre la participación cuando comenté a mi padre lo sucedido,relatado a la mitad, como un cuento maldito hecho realidad.
Mi padre, incrédulo, me preguntó sobre el nombre
que mencionaron y yo le contesté que se trataba del gran cazador, Satán.Mi padre se llevó las manos a la cabeza, y eso que era un hombre de un gran temple,por lo que parecía que estábamos hablando de alguien importante y mi temor se acentuó mas.
_¿Satán? ¡Satán! ¡Dios mío! exclamó. Es probable que una profecía negra se haya adueñado de nuestro pueblo. Vamos, hemos de consultar al sacerdote ahora mismo. Ven con tu hermano, te esperaré en la cima de los siete árboles.
RESERVADOS DERECHOS DE AUTOR
Por Samuel Miralles
....continuacion
Como si fuera mi segunda madre apunto de contarme un cuento sobre
lo que me habían contado de ellas las escuché mientras mi hermano jugaba con ellas.
Como si de una lección de moral se tratase, una lección de aprender a hablar cuando toca, el polvo derramado en mis labios los secó por completo dejando sin saliva mi paladar y bajando hasta mi garganta, enmudeciéndome y dándome ardor en la boca.
_Hablas mucho para nada, tu hermano es libre de hacer lo que quiera, tú mismo lo dijiste, entonces, ¿por qué sigues defendiendo esta aldea
que creís todos la elegida y la misericordiosa a la par que construís enormes muros de piedra y trampas para que no os robemos nada
si la sabia naturaleza no elige lo que es propiedad de alguien?
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| Terror de la Mano de Samuel Miralles |
Refunfuñaron como tratándome de dar una lección de moral, además
de tener que soportar su maldad. Aturdido físicamente traté de recobrarme, y con un fuerte siseo, mas su dedo índice señalando su boca se marcharon. Yo intentaba salir fuera y pedir auxilio pero mi boca me lo impidió, al estar seca y enmudecida.
Nombraron a alguien que era el máximo cazador del mundo, el príncipe de la muerte o el carnívoro de nacimiento. Dijeron que cada uno es libre y que no existían elegidos, toda oportunidad de ser elegido corría a suertes de cazar ,nada más que eso, y no ser cazado.
Unas fuertes carcajadas se oían a lo lejos, las cuales me aterrorizaban de pensar que si ese máximo cazador venia aquí podría comer cualquiera de nuestras carnes, incluyendo la mía,lo que me hizo sudar y volver a tener temor en
mi corazón.Mas tarde,me acosté con miedo e impotente de lo ocurrido y tuve una visión en la que yo me sentí tremendamente defraudado
y triste de haber sido tan benevolente con las brujas, como si yo les hubiera cedido el paso y contemplaba impotente como todas las plantas,árboles,flores y demás enseres del pueblo eran arrasados por un gran torrente de fuego.Observé todo aquel espectáculo paralizado de miedo y con estupor, a la par que responsable por no hacer temer al pueblo de las brujas,oyendo carcajadas de brujas al fondo.
Esta parecía una visión que no tenia fin y a la cual respondía la voz de mi certeza como un fatal sino ineludible.
Cuando me desperté recordé el nombre del gran cazador:Satán.
Nunca había oído hablar de él. Unas piedras cayeron del árbol donde estaba cobijado y fue cuando desperté de aquel lento y angustioso sueño.Desde entonces no volví a ver a mi hermano.Cuando el sol salió fui a visitar a mis padres con gran arrepentimiento de no haber cuidado de mi añorado y querido hermano.
Sentía arrepentimiento y responsabilidad por la aldea, cambié de ideas y participé mas en el pueblo.
Sin embargo,el arrepentimiento y el miedo primaban sobre la participación cuando comenté a mi padre lo sucedido,relatado a la mitad, como un cuento maldito hecho realidad.
Mi padre, incrédulo, me preguntó sobre el nombre
que mencionaron y yo le contesté que se trataba del gran cazador, Satán.Mi padre se llevó las manos a la cabeza, y eso que era un hombre de un gran temple,por lo que parecía que estábamos hablando de alguien importante y mi temor se acentuó mas.
_¿Satán? ¡Satán! ¡Dios mío! exclamó. Es probable que una profecía negra se haya adueñado de nuestro pueblo. Vamos, hemos de consultar al sacerdote ahora mismo. Ven con tu hermano, te esperaré en la cima de los siete árboles.
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