Felicidad desde la Antigua Grecia

Aqui os dejo un texto perteneciente a un enlace de una pagina web...de Jorge Bonilla...donde nos habla de la felicidad en la antigua grecia...ya los griegos la practicaban y por que no saber como...espero os guste y no dudeis en comentar...

En la antigüedad (todavía aún en ciertas comunidades indígenas), los viajes eran la naturaleza de la humanidad, se movían de lugar en lugar, buscando comida y adaptándose al clima. La primera civilización organizada de Europa fue Grecia, cuando doce o trece Siglos A.C. llegaron grupos de personas provenientes tal vez de Egipto o Asia Menor a poblar las tierras europeas.  Se establecieron en la isla de Creta, donde el Rey Minos se estableció en el poder de la isla. Es desde esta época que se tiene información de la gente que,  preocupada por el uso del tiempo libre, encontró en algunas manifestaciones, expresiones de felicidad y que con el paso del tiempo, dejaron hechos importantes que nos permiten explicar muchas cosas que hacemos hoy en día, como por ejemplo los viajes y el turismo.

En el Mediterráneo se estableció la Civilización Griega

Aunque lo que se sabe que sucedió en esta época no es del todo verídico, es entre la historia y la leyenda que se reconstruyen los hechos gracias a la evidencia que se ha encontrado por aventureros, exploradores y científicos. Por un lado en el arte, que permite la expresión de las personas. Los griegos trabajaban la escultura y también decoraban las paredes de las casas con pinturas. Por otro, en el deporte. En esta época se jugaba el ajedrez, se practicaba la caza y se hacían luchas hombre a hombre y en diferentes categorías. Y ni qué decir de la música y la danza que siempre acompañaban a los griegos. Esto distraía al pueblo en su tiempo libre, lo hacía feliz. Según decía Homero unos años más tarde, era también de gran importancia la belleza física en las personas, ellos admiraban a los atletas por sus capacidades y por la estética del cuerpo humano. Cabe destacar que los Juegos Olímpicos nacieron en Grecia en los tiempos de Homero (S.VIII A.C.).

Monumento al Estadio Olímpico de Barcelona

Las expresiones de felicidad son innatas en el ser humano, incluso en los animales. Los animales juegan entre sí, se divierten cuando pueden, no sé si todos, seguramente otros lo habrán investigado mejor, pero sí que es evidente la alegría en un perro cuando juega con una pelota o cuando se encuentra con otro amigo. El ser humano siempre ha buscado su felicidad, pero aquí encontramos evidencias de cómo lo hacían. Si bien los esclavos existían en esta época, los griegos los trataban bien, eran como parte de la casa y tenían derecho incluso a disfrutar de tiempo libre, podían ser felices.

Fue pasando el tiempo y los griegos se fueron expandiendo, iban creando colonias (Apoikias) fuera de la acrópolis –las ciudades creadas en la cima de las montañas– donde se generaba un liderazgo particular en cada una de las nuevas ciudades (polis). Estas colonias se expandieron hasta Nápoles, Reggio, Síbaris, Crotona, Niza y Bengasi. En todo el Mediterráneo, no parecían existir civilizaciones organizadas salvo en la civilización griega, que si bien nunca se conformó como un Estado, sus habitantes hablaban el mismo idioma entre ellos y creían en los mismos dioses, Zeus a la cabeza (aunque nunca se pusieron de acuerdo con sus descendientes). Los dioses les daban esperanza, motivos para vivir y luchar por unos y otros. El día que la filosofía destruyó los dioses, los griegos perdieron las fuerzas y se dejaron subyugar por los romanos.

Distribución de la Civilización Griega

Si bien mientras los griegos se iban organizando como una gran civilización, el tiempo libre fue evolucionando y no solamente era utilizado para el deporte y el arte sino también para escribir y para pensar. La gente se divertía por montones cuando Homero les contaba historias y cuentos acerca de su visión del mundo. Muchos dicen que era analfabeta pero sus historias divertían enormemente a la gente. De ahí que algunos se dedicaron a escribir las historias de este personaje y es lo que hoy tenemos como herencia en la Ilíada y la Odisea, donde a través de la poesía se cuentan historias de héroes y del drama de la vida. Es así como se impone en los griegos la literatura como parte esencial de la sociedad y a través de los concursos de literatura y poesía, se incrementa el buen uso del tiempo libre donde el no hacer nada no es bien visto. El deporte, el arte y la literatura, son ahora manifestaciones que hacen felices a los griegos.

Así como la civilización fue evolucionando, también fue progresando la producción intelectual de los griegos que ya no solamente buscaban momentos de alegría y felicidad sino que se empezaron a preguntarse sobre las cosas del mundo. La misma literatura y el arte los llevaban a pensar más allá, a buscar explicaciones en las cosas. La cocina, la moda y el deporte, ya era solamente un tema de los esclavos, los ciudadanos ahora, solo se dedicaban a escribir y a pensar. Allí nacieron las primeras academias que cada vez fueron tomando un carácter más serio. Cada vez que se conocía algo nuevo, se convertía en un motivo más para seguir buscando. Las matemáticas, la geometría, la aritmética, el estudio del cosmos y del planeta tierra, ocuparon la mente de los grandes pensadores griegos.

Pitágoras nace en esta época y fundó su propia academia en Crotona (Italia), luego de viajar por el Mediterráneo y de conocer diferentes academias de la civilización griega. Allí quiso superar el conocimiento práctico que habían generado los egipcios. La ciencia empieza a hacerse aquí, con un método inicial. El axioma, el teorema y la demostración. Lo malo es que la obsesión por el conocimiento, convirtió a Pitágoras en un dictador. Prohibió en Crotona el consumo de vino, carne, huevos, habas, prohibió el amor y la risa. Le quitó la maravilla al estudio, al aprendizaje, desconoció el origen del conocimiento como manifestación de felicidad y seguramente, acabó con las inspiración de muchos. Sin duda alguna fue un gran científico que incluso afirmó por primera vez en la historia, que La Tierra era redonda, pero distó mucho de ser un ser humano ejemplar.

Crotona, Dictadura Intelectual de Pitágoras

En Cambio Tales, nacido en Mileto 60 años antes de Pitágoras (640 A.C.), fue un hombre poco musculoso, poco atractivo y aún menos hábil para entablar relaciones sociales con la gente. Era muy introvertido pero con una excepcional paz interior. Lo que no logró a punta de diálogo, lo logró a punta de inteligencia. Prediciendo una bonanza de aceitunas con sus cálculos, logró ir en contra de los pronósticos de los demás y así, logró hacer una fortuna suficiente para vivir el resto de sus días de sus proyectos científicos. Tales se ganó así el respeto de la sociedad en general, con el arma de su inteligencia. Era un una persona distraída, curiosa y capaz de observar los detalles de las cosas con gran capacidad de intuición. Viajó a Egipto para enriquecer su conocimiento con el de sus predecesores egipcios, admirando sus logros para trabajar sobre ellos, para construir sobre lo construido. Describía la vida feliz como la justicia: “no hacer a los demás lo que no se quiere que sea hecho con nosotros”. Nacieron entonces en Grecia las reglas de moralidad y la organización social basada en principios.

Hogar de Tales

Con Solón nació la primera organización democrática en Atenas, donde todos los ciudadanos (los esclavos ya no eran considerados ciudadanos) eran libres y estaban sujetos a las mismas leyes. Entre más dinero aportaba al erario público un ciudadano, más tiempo servía en el ejército y más altos cargos tendría. Los ciudadanos buscaban servir a los demás y pagaban para poder hacerlo, amaban sus tierras y a sus habitantes. Había paz entre ellos y al principio, en esta democracia los ciudadanos, orgullosos de su modelo, respetaron al Gobierno y de la misma manera, los gobernantes respetaron las leyes. Solo así, manteniendo una vida sin excesos, llegarían a la felicidad que por ese entonces se decía, era el estado final al que se llegaba después de la muerte, luego de vivir una buena vida.

Fuente:  Felicidad en la antigua grecia